El término joyería gema hace referencia a todas las piezas de joyería que están engastadas con piedras preciosas de colores. Las gemas elaboradas se caracterizan por sus colores brillantes y se clasifican según tres características: rareza, dureza Mohs y transparencia. Como valor de rareza se utiliza la presencia absoluta en todo el mundo. La escala de Mohs describe la dureza de la gema y se divide en valores de 1 a 10, por lo que las gemas deben tener un valor de al menos 7. La transparencia se refiere a las inclusiones y arañazos visibles en la piedra. Para engarzar las gemas en las distintas piezas de joyería, como pulseras, anillos, collares y similares, primero hay que tallarlas. De este modo se crea el atractivo destello y el brillo característico que hacen tan especiales a las joyas con piedras preciosas. Las joyas con gemas siempre dan un protagonismo muy especial a la parte en la que se llevan. Cualquier material, como la plata, el oro o el platino, puede engastarse con piedras preciosas. Las gemas más populares son los rubíes, los zafiros y las esmeraldas. Pero los topacios, los citrinos y las amatistas también son muy populares y suelen utilizarse para realzar joyas. Las joyas engastadas con diamantes también pertenecen a la joyería con gemas, aunque en realidad pertenecen a las modificaciones del carbono. Dado que las piedras preciosas pueden engastarse en una gran variedad de materiales, las joyas pueden encontrarse en todos los segmentos de precios y son, por tanto, un accesorio muy popular.
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